El pasado jueves 14 de agosto, el Museo de las Atarazanas Reales (MAR) y SOS Biotech realizaron el panel “Sumérgete en el Océano: Ciencia, Retos, Oportunidades y Cultura de Nuestros Mares”, un encuentro que reunió a diversas voces del Caribe para reflexionar sobre los principales desafíos que enfrentan los océanos, como el sargazo, y para destacar oportunidades desde la ciencia, la cultura, la sostenibilidad y la acción comunitaria.
El evento contó con las palabras de apertura de Mónica Gutiérrez Fiallo, directora del MAR, y Andrés Bisonó León, CEO del Grupo SOS. Entre los panelistas invitados estuvieron Elena Martínez Martínez, CTO de SOS Biotech; Miguel Baruzze, jefe de operaciones del BID; Rosario Aróstegui, vicerrectora de Investigación y Vinculación del INTEC; y Jimmy García, presidente de ANAMAR.
Durante su intervención, Mónica Gutiérrez Fiallo destacó el valor de la cooperación entre instituciones:
“Es un honor contar con la presencia de representantes de la Fundación Terra & Marre y SOS Biotech, acompañados de directivos del BID y ANAMAR, aliados con quienes compartimos una nueva etapa de cooperación. Esta tarde presentamos la alianza entre nuestras instituciones, un esfuerzo que une la preservación de la memoria marítima que custodia este museo, con la innovación y la acción ambiental que lideran nuestros aliados.”
La directora del MAR subrayó además la importancia de vincular historia y futuro:
“Unir la memoria que custodiamos con la visión de futuro que ellos impulsan es tender un puente entre siglos de historia y los desafíos de hoy. Es reconocer que el mar no es solo parte de nuestro pasado, sino también clave para nuestro porvenir. Y es, sobre todo, reafirmar que protegerlo es un compromiso compartido, para que las generaciones que nos sigan puedan seguir encontrando en él identidad, sustento y esperanza.”
Por su parte, Andrés Bisonó León hizo énfasis en que aquello que muchos aún consideran únicamente un problema ambiental y económico —como el sargazo— ha sido transformado por su equipo en una oportunidad, enfrentándolo con visión de futuro y con la meta de convertirlo en un recurso valioso. En sintonía con esta idea, Jimmy García resaltó cómo estos esfuerzos se integran en la promoción de la economía azul, incentivando modelos de desarrollo que fortalecen tanto la sostenibilidad ambiental como la generación de oportunidades económicas en las comunidades costeras.
Rosario Aróstegui destacó la importancia de construir marcos regulatorios sólidos que permitan implementar soluciones efectivas, subrayando que el papel de los investigadores es fundamental en este proceso. Señaló que la academia busca motivar tanto a la sociedad como al Estado para que se interesen en este tipo de proyectos, asegurando su financiamiento y ejecución en beneficio de todos y todas.
Por su lado, Miguel Baruzze recalcó las oportunidades de negocio que puede generar la economía azul, y explicó que BID Lab, como brazo de innovación del Banco Interamericano de Desarrollo, incorpora actores y recursos para co-crear soluciones innovadoras, desarrollar ecosistemas emprendedores y fomentar la adopción de tecnologías disruptivas.
La jornada finalizó con un cóctel y un espacio de networking entre panelistas y público interesado, realizado en los espacios del Museo de las Atarazanas Reales de Santo Domingo, institución que alberga una de las colecciones de arqueología subacuática más importantes de la región.