Durante la noche larga de museos, el Museo Naval de las Atarazanas Reales atrajo a una gran cantidad de visitantes tanto locales como turistas que aprovecharon la oportunidad de explorar sus fascinantes exhibiciones en un horario extendido. Este evento, organizado por el Ministerio de Cultura desde la Dirección General de Museos, tiene como objetivo promover y divulgar nuestra historia y cultura, fortaleciendo el conocimiento del patrimonio nacional entre la comunidad y los visitantes extranjeros.

Ubicadas en un edificio que data del siglo XVI, las Atarazanas Reales poseen una historia profunda y significativa. Originalmente utilizadas como astillero real, estas instalaciones constituyen una de las estructuras más antiguas de América, y dan testimonio de las labores de reparación naval y de las funciones aduaneras llevadas a cabo durante la época colonial. Estas actividades eran esenciales para el control marítimo y económico de la Corona Española, y jugaron un papel clave en el desarrollo de la región. Hoy, la imponente arquitectura de las Atarazanas no solo representa un patrimonio histórico invaluable, sino que también alberga una fascinante colección de arqueología subacuática que nos transporta a las vivencias de pasajeros y tripulantes de los navíos que surcaban las aguas alrededor de la isla de Santo Domingo.

Las visitas ofrecidas durante el evento se complementaron con actividades especiales diseñadas para cautivar a los asistentes, incluyendo un taller de arte para el público jóven, y demostraciones interactivas con un personaje vestido de pirata. Estas actividades no solo permitieron a los visitantes aprender más sobre la historia naval, sino que también enriquecieron la experiencia, convirtiendo la noche en una oportunidad única para conectar con nuestras raíces y apreciar la importancia de conservar nuestro patrimonio subacuático.